En la caza del sarrio, al igual que en la del rebeco, podremos disfrutar de incomparables vistas y bellos paisajes. 

Dado a la orografía y la altitud donde habitan estos ungulados, tendremos que gozar de buena forma física, al menos de grado medio, para acceder a sus mejores zonas de querencia y conseguir grandes trofeos. Esto hace del sarrio y el rebeco un trofeo muy valioso para todo cazador.

Llevamos a cabo su caza en el Pirineo Catalán, en cotos muy bien gestionados cercanos y linderos con las conocida Reserva del Cadí, donde garantizamos conseguir trofeos medallables. 

Cazamos trofeos a precio cerrado y sin límite de puntos, consiguiendo una media de plata, y en no pocas ocasiones oros, algunos de estos sobrepasan los 100 puntos. Por lo general, en condiciones normales, conseguimos culminar la caza en el primer día, siendo recomendable desplazarse preparados contando con cazar dos dias. 

Se suelen jugar lances a distancias superiores a los 150/200 metros, por lo que aconsejamos comprobar muy bien el correcto centrado de las armas antes del desplazamiento a la zona de caza.